Operadora en PsicologÃa Social, poeta
Uruguay
Estas palabras surgen con la intención de invitar, de provocar ganas, de convocar inquietudes, porque estoy convencida de que son esas vicisitudes las que hacen productivos los diálogos.
Cuerpo, palabra y creación se presenta como una AntologÃa de poetas uruguayas desde el prólogo entusiasta de su editora MarÃa Sánchez, también poeta.
Encuentro no parece ser sólo el nombre elegido para su editorial, sino la sÃntesis de su posicionamiento, ante el lugar de la poesÃa en la vida y, desde allÃ, nos ofrece su producción, haciéndola llegar hasta nuestras manos —en el caso de Montevideo—, en una suerte de entrega a domicilio poética, hasta cada sitio, con su bicicleta alada.
Participan de la antologÃa: Andrea Arismendi, MarÃa Laura Blanco, Marisa Canut Guevara, Macarena Cardozo, Teresita Costa, Isabel de la Fuente, LucÃa Delbene, Nidia Di Giorgio, Isabel Gallo, Maia GarcÃa, Melba Guariglia, Eliana Lucián, Claudia Magliano, Susana Maisonnave, Dolores Meijueiro, MarÃa Laura Pintos, Verónica Sánchez, Paula Simonetti, Elena SolÃs, Ana Strauss.
El libro está en mi escritorio, junto a otros papeles garabateados, que testimonian la búsqueda de apoyaturas prácticas y teóricas para develar una incómoda interpelación (incluso a mis propios escritos):
¿Los textos que escribimos las mujeres, d/escriben la tarea propuesta desde esa tan acertada formulación del «ir siendo mujer», según Beauvoir?
¿Será este libro una oportunidad para (per)seguir esas interrogantes?
Son varias las autoras que proponen la visibilidad de una escritura femenina — Hélène Cixous, entre otras tantas—, incluso de la restauración de una voz o de una doble voz, como plantea Alicia Ganese, que recoge «las marcas culturales de género» (Bellessi) tanto como su capacidad de resistirlas y resignificarlas, presentes en la poesÃa escrita por personas que se definen como mujeres.
¿Será posible reconocer algunos signos emergentes de estas caracterizaciones? ¿O quizás es una construcción discursiva, emergente de un posicionamiento feminista, que, al insistir entre otros discursos, la prefigura?
La tentación que me convoca a su lectura es precisamente la posibilidad de encontrar algunas de esas posibles insistencias en los escritos de estas veinte mujeres de entre 30 y 50 años (y pico) incluidas en la selección de autoras.
Creación, palabra y cuerpo (solo quizás) un hilo conductor de las poesÃas
El reordenamiento de las palabras presentes en el tÃtulo del libro elegidas para esta sección, intentan subrayar, a partir de ese juego, algunas de las resonancias que me habitan, luego de la lectura de los textos de estas veinte poetisas seleccionados.
También busca visibilizar un perfil de ese ir siendo mujer presente en la escritura, más allá de las decisiones conscientes, que a la vez puede ser tomado como un eje ordenador de insistencias presentes en los textos concretos; un eje que orienta una lectura intencional, además de interesada.
Dentro del libro nos encontrarnos con las autoras ordenadas alfabéticamente, pero si aceptamos la propuesta de su editora y prologuista, que señala: «El entramado de los textos deja espacio para la interpretación y estudio de quienes quieran acercarse a la poesÃa uruguaya escrita por mujeres», podemos buscar otros ordenamientos posibles.
Luego de una lectura alerta tanto como disfrutable de todos los poemas creo encontrar, sostenida en la propuesta feminista de que «lo personal es polÃtico», que estas palabras escritas desde cuerpos habitados por lo cultural y modelados por la semiosis social (Verón, 1993), son asimismo enunciación y elucidación.
Para que me acompañen en esta búsqueda interpelante y curiosa, propongo dos ejes ordenadores de insistencias, que se instalaron ante mi mirada, luego de la lectura.
Ellos juegan resonando en mÃ, al reiterarse entre los versos, como apoyaturas sutiles de las propuestas poéticas, asà como dibujos incipientes de los modelos esperados, deseados o resistidos del ir siendo mujer.
Los hilé luego de recorrer cada poema, recortar versos, ir hacia atrás para reencontrar imágenes o avanzar hasta recuperar en otros versos, una imagen hallada previamente. Nunca como repetición o copia, sino como insistencias de un latido que busca manifestarse.
Las insistencias que se dibujaron ante mi búsqueda intencionada son las que ocupan el lugar de esta última sección.
Algunos breves ejemplos, desde los textos de las autoras, para que convoquen otras miradas:
Insistencias I. cuerpo(s)/carne/sangre
se cuela por las cuencas
coloniza el cuerpo todo
(Isabel Gallo)
cuando por primera vez sentà que el alma o el espÃritu
se me desgarraba y no podÃa retener la sangre
no podÃa retener la sangre ni el llanto
(Claudia Magliano)
y tus manos recorriendo
los puntos cardinales de mi cuerpo
alisan mis arrugas, mis surcos imperfectos
(Susana Maisonnave)
Mi alma chorrea sangre por la alfombra y no sabré limpiarla
(Verónica Sánchez)
Insistencia II. voz/(espejo)/identidad/palabra
mi única voz/
(…)
Se la quedó el bosque
(Andrea Arismendi)
necesito una voz que sostenga las palabras
(Marisa Canut Guevara)
también el miedo
casi certeza
—creo—
de no encontrar al fono
sino otro espejo
(Teresita Costa)
entonces
me acostaré con cualquier palabra
por amor
(Melba Guariglia)
Palabras que al enunciarse convocan imágenes, sentidos, significantes novedosos o repetidos; que elucidan diversos modos de reinscribir un cuerpo en relación con otros y su contexto.
Y la creación como tarea sostenida, desde la escritura hacia la propia identidad personal y colectiva.
Sin dudas, son sólo hipótesis, vibrando gozosas entre las resonancias de los poemas presentes en esta antologÃa creada con tanta dedicación ética y estética.
Con humildad, les propondrÃa insistir en la búsqueda de su confrontación, leyendo y regocijándose con este libro de poemas, que va rotundo hacia el encuentro, humilde y despojado, transitado por miradas que se respetan mutuamente.
Cuerpo, palabra y creación. AntologÃa de poetas uruguayas
Coordinadora MarÃa Sánchez
Uruguay, 2018
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